La tortícolis congénita es una condición pediátrica caracterizada por una inclinación anormal de la cabeza y el cuello hacia un lado. Esta afección ocurre debido a un acortamiento del músculo esternocleidomastoideo (ECM), que es el principal músculo responsable de la flexión y rotación del cuello. El músculo acortado provoca que la cabeza del bebé se incline hacia un lado, mientras que la barbilla se dirige hacia el lado opuesto.

¿Qué es la Tortícolis Congénita?

Definición de Tortícolis Congénita

La tortícolis congénita es una afección en la que un recién nacido o bebé presenta una inclinación anormal de la cabeza y el cuello, resultante de un acortamiento del músculo esternocleidomastoideo (ECM) en uno de los lados del cuello. Este músculo, ubicado en ambos lados del cuello, es esencial para la flexión, rotación y inclinación de la cabeza.

En la tortícolis congénita, el músculo esternocleidomastoideo se encuentra acortado y tenso en un lado, lo que provoca que la cabeza del bebé se incline hacia ese lado, mientras que la barbilla se dirige hacia el lado opuesto. Esta condición es evidente desde el nacimiento o se desarrolla en los primeros meses de vida, y puede causar incomodidad y problemas en el desarrollo motor si no se trata adecuadamente.

Características clave de la tortícolis congénita incluyen:

Características Clínicas

Presentación en Bebés:

Diferenciación de Otros Tipos de Tortícolis:

Importancia de la Diferenciación:

Distinguir entre la tortícolis congénita y otros tipos de tortícolis es crucial para elegir el tratamiento adecuado. La tortícolis congénita requiere un enfoque basado en la fisioterapia y técnicas de estiramiento para corregir la inclinación anormal, mientras que otros tipos de tortícolis pueden necesitar tratamientos diferentes basados en la causa subyacente.

Causas de la Tortícolis Congénita

Causas Prenatales

  1. Compresión Fetal:

Durante el embarazo, la posición del feto dentro del útero puede influir significativamente en el desarrollo de sus músculos y tejidos. La compresión fetal ocurre cuando el feto se encuentra en una posición anómala o está restringido en el útero, lo que puede afectar el desarrollo normal de los músculos, incluyendo el músculo esternocleidomastoideo (ECM). Este tipo de compresión puede provocar un acortamiento o una tensión anormal del ECM, contribuyendo al desarrollo de la tortícolis congénita.

  1. Factores Genéticos:

Aunque la tortícolis congénita no se hereda de manera directa en todos los casos, algunos estudios sugieren que puede haber una influencia genética en el desarrollo de esta condición. Los factores genéticos pueden predisponer a un bebé a desarrollar una predisposición a problemas musculares y de desarrollo, incluyendo la tortícolis congénita.

Causas Postnatales

  1. Trauma al Nacimiento:

El trauma durante el parto puede contribuir a la tortícolis congénita si el bebé experimenta una presión excesiva o una manipulación agresiva durante el nacimiento.

  1. Posiciones y Actividades:

Las posiciones en las que el bebé pasa mucho tiempo después del nacimiento y ciertas actividades también pueden influir en el desarrollo de la tortícolis congénita.

Síntomas de la Tortícolis Congénita

 

Síntomas Iniciales

  1. Inclinación de la Cabeza:

Uno de los síntomas más evidentes de la tortícolis congénita es la inclinación anormal de la cabeza del bebé. Este síntoma se manifiesta de las siguientes maneras:

  1. Restricción del Movimiento del Cuello:

Otro síntoma crucial es la restricción en el movimiento del cuello, que puede manifestarse de las siguientes maneras:

Síntomas Asociados

  1. Desarrollo de Pliegues Musculares:

La tortícolis congénita puede llevar al desarrollo de pliegues musculares en el cuello, que se manifiestan como sigue:

  1. Asimetría Facial:

La posición persistente de la cabeza puede resultar en cambios en la simetría facial, que se evidencian de la siguiente manera:

 

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